Los fondos buitre son claves para el ‘build to rent’
El SIMA acaba de cerrar sus puertas con buenas sensaciones. Además de la oferta de 15.000 viviendas presentada en el Salón Inmobiliario Internacional de Madrid –la mitad de ellas en la capital–, los expertos coinciden: el sector inmobiliario ha recuperado en dos años las cifras prepandemia. Se estima que un 13% de los visitantes acudía a la feria con un objetivo real de adquisición de vivienda, si bien el comprador de vivienda habitual representa a tres de cada cuatro. Como recuerda José María Gómez-Acebo, las cifras son testimonio de la preferencia por la propiedad frente al alquiler. “La vivienda sigue manteniendo su atractivo como activo de inversión, y ha canalizado históricamente el ahorro de los españoles”, que llegó a máximos durante la pandemia. Además, la incertidumbre generada por la inflación, la guerra de Ucrania y el encarecimiento del petróleo y la energía subrayan el valor de los activos refugio.
Pero hay cambios. En el SIMA hay cada vez más visitantes centrados en la vivienda turística o la segunda residencia, que en en esta edición suben tres puntos, hasta el 9% del total. La consultora Colliers cifra en 250.000 millones de euros la inversión necesaria en España para atender a la demanda de vivienda en alquiler. Muchos fondos han impulsado esa oferta con el build to rent. “Deberíamos dejar de llamar fondos buitres a un operador que es clave para asegurar que se cubre esa demanda en el mercado del alquiler”, apunta el director de Clientes Institucionales de Urbanitae.
Puedes escuchar la intervención íntegra de José María Gómez-Acebo en el programa Inversión Inmobiliaria, de Capital Radio, aquí.