España, pendiente de rehabilitar 10,4 millones de edificios
Pasados los 40, crece el riesgo de experimentar lo que se denomina una crisis de la mediana edad. Se toma conciencia sobre la edad, la mortalidad y, quizá, la falta de logros personales. Si hablamos de inmuebles, por el contrario, 40 años parecen pocos, pero son tanto o más problemáticos desde el punto de vista medioambiental. Por fortuna, mitigar los efectos del envejecimiento inmobiliario sí presenta soluciones evidentes. Rehabilitar edificios es una de ellas.
Entre el 85 y el 95% de los edificios de la Unión Europea (UE) seguirán en pie en 2050. No hay nada de malo en la noticia, salvo si pensamos en que el 85% –más de 220 millones de inmuebles– se construyeron antes de 2001 y son poco eficientes desde el punto de vista energético. En España, de hecho, la media de edad del parque de vivienda usada es de 40,1 años.
La construcción representa más del 35% de la generación total de residuos de la Unión Europea, mientras que los edificios consumen el 40% del total de la energía y generan el 36% de las emisiones de gases de efecto invernadero procedentes de la energía. Se calcula que solo el uso de materiales más eficientes podría reducir el 80% de dichas emisiones. No es de extrañar que la renovación del parque de edificios sea una de las prioridades del Pacto Verde Europeo y de los planes de sostenibilidad en España.
‘Oleada’ de rehabilitación
Mejorar la eficiencia de los edificios se ha revelado una pieza clave del puzle necesario para cumplir los objetivos climáticos. Por eso, la UE se ha propuesto renovar 35 millones de edificios ineficientes entre 2020 y 2030 para contribuir a reducir las emisiones comunitarias al menos un 55% en dicho periodo. Para conseguirlo, la Unión debe reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en un 60%, su consumo final de energía en un 14% y su consumo de energía para calefacción y refrigeración en un 18%.
El problema es que, sin tener en cuenta la inflación y las complicaciones derivadas de la guerra en Ucrania, el ritmo de renovación es lento. Como señala la Comisión Europea, solo el 11% del parque inmobiliario de la UE se renueva en alguna medida cada año. El tipo de actuaciones que reducen al menos un 60% el consumo de energía solo se aplican anualmente en un 0,2% de los edificios. La llamada Oleada de renovación busca acelerar la tendencia.
Rehabilitar edificios en España
En España, hay planes aprobados para impulsar la rehabilitación de viviendas. El Gobierno contempla una inversión estimada de 6.820 millones de euros en el componente 2 de su Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), el Plan de rehabilitación de vivienda y regeneración urbana.
El pasado octubre el Consejo de Ministros aprobó dos decretos en este sentido, que suman 5.520 millones de euros de inversión, con cargo a los fondos europeos. Las medidas recogen deducciones fiscales para realizar obras que mejoren la eficiencia energética en viviendas y edificios residenciales y una línea de avales ICO de hasta 1.100 millones para financiar obras de rehabilitación.
El objetivo es reducir al menos un 30% el consumo de energía no renovable en los hogares y descarbonizar y bajar la demanda de calefacción y refrigeración como mínimo un 7%
Al mismo tiempo, 3.420 millones de los 5.520 millones euros del Programa de rehabilitación y promoción de vivienda social se destinarán a efectuar más de medio millón de actuaciones de renovación hasta junio de 2026; 1.080 millones, a rehabilitar edificios públicos locales y autonómicos, y 20 millones de euros, a proyectos piloto de Agenda Urbana Española –orientados a un “desarrollo rural y urbano sostenible”–.
En total, se espera ejecutar 510.000 actuaciones de rehabilitación durante todo el periodo de aplicación del PRTR, lo que se debería traducir en una media de 71.000 al año. Aunque el ritmo de actuaciones ha ido en aumento, el propio Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) 2021-2030 fija como objetivo reformar 1,2 millones de viviendas en el periodo 2021-2030. Eso implicaría llegar a 2030 con 300.000 viviendas rehabilitadas al año.
Según el Green Building Council España (GBCe), las cifras no son suficientes. Alcanzar el ritmo de rehabilitaciones necesario para cumplir los objetivos climáticos –10,4 millones de viviendas– implicaría una inversión anual de 7.500 millones de euros hasta 2050. Queda, pues, mucho por hacer.