Diez consejos antes de adquirir un inmueble
El 60% de los españoles considera que la adquisición de una vivienda es la mejor forma de ahorrar en el futuro, según se desprendía de una encuesta del CIS. De hecho, la compra de un inmueble para después alquilarlo o venderlo puede proporcionarnos rentabilidades muy altas con menor riesgo que otra clase de productos financieros.
Para aquellos que están pensando en entrar en este mercado, nuestros expertos han preparado diez consejos que estamos seguros de que os ayudarán a valorar el potencial de vuestra inversión:
- Valorar el activo con mayor rendimiento (residencial, comercial o industrial)
Analizar el mercado inmobiliario para conocer qué activo inmobiliario ofrece mayor rendimiento es primordial. Un estudio elaborado por Idealista destaca que las oficinas, con un rendimiento del 9,6%, son actualmente la inversión inmobiliaria más rentable; seguidas de los locales, con un 8,6%; la vivienda, con un 7,6%; y los garajes, con un 6,5%.
- Elegir bien la zona en la que invertir
La ubicación del inmueble influye de forma directa en el rendimiento de la inversión. No es lo mismo adquirir una propiedad en una gran ciudad que hacerlo en una zona secundaria o en una de costa; como tampoco ofrece el mismo beneficio comprarla en el centro urbano o en la periferia. Por ejemplo, Murcia, con un 7,6%, es la capital española más rentable para invertir en residencial; Huelva, con un 10,8%, la que mayores beneficios reportan al invertir en locales comerciales; mientras que Sevilla presenta el mayor retorno en oficinas, con un 9,7%.
- La época del año también es determinante
Realizar una inversión inmobiliaria beneficiosa o no depende también del momento del año que elijamos para ello. Normalmente, si buscas una vivienda, la primavera y especialmente abril es la época que elige la mayoría de los ciudadanos para comprar una casa, lo que conlleva que el precio de estos activos sea más elevado. Por eso agosto y septiembre se convierten en los meses más idóneos para nuestra inversión, según Business Insider.
- Valorar el tamaño del inmueble
Antes de comprar un inmueble tenemos que analizar el tamaño de la propiedad que nos interesa porque luego influirá en la posterior venta o alquiler. A priori es más sencillo vender un pequeño apartamento que una gran mansión o un mega centro logístico, pero todo dependerá de nuestra capacidad de inversión.
- Tener en cuenta los gastos fiscales
Los expertos en el sector inmobiliario recomiendan informarse de estos conceptos y sus correspondientes cuantías antes de realizar la compra para conocer por anticipado cuál es el desembolso que tendremos que destinar a este epígrafe. Por ejemplo, la compraventa de una vivienda implica el gasto derivado de la gestoría, la escritura pública en la notaría, la inscripción en el Registro de la Propiedad, el pago del IVA si la casa es nueva o el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales si es de segunda mano, etc.
- Estudiar si realizamos una reforma o no
Es una parte importante ya que una reforma supone un desembolso extra a nuestra compra. Pero los expertos del sector destacan que adquirir una vivienda y reformarla puede aumentar el valor de la misma hasta un 30%. Por ello, debemos valorar si nos compensa más comprar un inmueble barato y reformarlo antes de su venta o adquirir directamente uno de obra nueva.
- Analizar el estado de las instalaciones, los posibles vicios ocultos etc.
En el caso de que nos decantemos por un inmueble de segunda mano debemos ver en detalle cuál es el estado de las instalaciones, las calidades de las infraestructuras y, especialmente, si existen vicios ocultos, es decir, desperfectos que no se ven a simple vista pero que a la larga pueden suponer una sorpresa. En este post de Urbanitae explicamos de forma más pormenorizada cuáles son y cómo afectan al comprador.
- Contabilizar los gastos de comunidad y mantenimiento del inmueble
Antes de adquirir el inmueble, tendremos que sumar otros gastos fijos asociados a la propiedad como los gastos de la comunidad. El importe de la cuota de comunidad depende en gran medida de las instalaciones (piscina, jardín, zona deportiva, etc.) y el equipamiento que tenga el inmueble y de su mantenimiento para que esté en buen estado.
- Conocer el público al que nos queremos dirigir
Identificar y cuantificar los perfiles que demandan cada tipo de inmueble nos ayudará a decantarnos por un tipo de activo u otro. En este sentido, la vivienda de lujo en el centro urbano de Madrid o Barcelona resulta muy atractiva para los compradores extranjeros; los pequeños apartamentos en zonas más alejadas del epicentro son una opción muy interesante para los jóvenes estudiantes; y una vivienda ubicada en un barrio residencial de la periferia es idónea para una familia. Lo mismo sucede en el segmento logístico, donde las grandes compañías del sector cada vez apuestan más por los urban hubs, locales situados en el centro de las ciudades que tienen un tamaño menor en comparación con los grandes desarrollos logísticos pero que les permiten ofrecer una entrega ultrarrápida a sus clientes online.
- Tener presente otras vías de inversión como el crowdfunding inmobiliario
Actualmente ya no es necesario comprar un inmueble ni tener un gran capital ahorrado para invertir en este mercado. Gracias a plataformas de crowdfunding inmobiliario como Urbanitae cualquier persona puede acceder a proyectos inmobiliarios realizando una pequeña aportación, lo que permite incluso la posibilidad de diversificar sus inversiones en varias propiedades o tipologías de inmuebles (residencial, comercial o industrial). En Urbanitae el proceso de inversión es 100% online, sin papeleos, ni visitas, ni trámites burocráticos. Una vez realizada la inversión, la rentabilidad se obtiene a través de tres estrategias: una de rentas, en la que se prioriza el alquiler; una estrategia de plusvalías, que prioriza el potencial de apreciación en el corto plazo; o bien una estrategia de deuda, en la que se invierte en préstamos al promotor.
Despejadas todas las dudas, invierte ahora con Urbanitae.