Inversión Hotelera: España obtiene matrícula de honor
España es el segundo país más visitado del mundo, sólo por detrás de Francia, según la Organización Mundial del Turismo (OMT). En la última década, destinos como, por ejemplo, Madrid, Barcelona y los dos archipiélagos han dado la bienvenida a un 30 % más de viajeros.
Como consecuencia del buen momento que atraviesa el sector turístico, uno de los principales motores de nuestra economía, el número de plazas hoteleras disponibles y también el apetito inversor por este segmento ha aumentado significativamente. Reflejo de ello es que la inversión hotelera en España volvió a batir récord en 2018 tras crecer un 23,1 % respecto al ejercicio anterior, y registrar un volumen de 4.810 millones de euros, según la ‘Radiografía del mercado de inversión hotelera en España 2018‘ elaborada por Colliers International.
Canarias y Baleares fueron las zonas que más inversión recibieron con 1.631 y 944 millones de euros, respectivamente. Ambos archipiélagos concentraron el 56,1 % de la inversión total situándose por delante de la capital española, que acaparó un desembolso de 601 millones de euros, el 13,1 %.
Por tipología de activos, en 2018 la inversión en hoteles vacacionales superó considerablemente a la registrada en el segmento urbano (66 % frente al 34 %). Pero si hay un dato destacable es el que hace referencia a los hoteles cinco estrellas. Los establecimientos premium se revalorizaron un 10 % de media en España en 2018, frente al 4 % experimentado en los hoteles de cuatro estrellas y la reducción del 7 % que registraron los de tres estrellas, según el informe ‘Mercado hotelero 2019’ de Tinsa.
Respecto al origen de los inversores, el 40 % del gasto que se realizó en 2018 procedía de Estados Unidos, frente a un 35 % de las inversiones que fueron nacionales, según un estudio de la consultora Christie & Co, que destaca que en los próximos meses España seguirá atrayendo interés inversor “en un entorno más volátil y competitivo”.
En este sentido, los expertos de Tinsa señalan que en 2019 las transacciones de inversión hotelera volverán a ser numerosas y la inversión en mejoras de establecimientos existentes “será una estrategia frecuente favorecida por el descenso del ratio entre costes y valor de la actividad en los últimos años”. “El sector turístico deberá incidir en mejoras hoteleras para adaptarse a unos años venideros más moderados en su crecimiento”, explica Rafael Gil, director de servicios de estudios de la sociedad de tasación.