¿Qué son los activos refugio?
Se podría decir que hay tantos inversores como grados de tolerancia al riesgo. Los más conservadores valoran el atractivo de los activos refugio, así llamados porque tienden a proteger mejor que otros el valor depositado en ellos. Sobre todo, cuando las cosas se tuercen en los mercados. ¿Los conoces?
Los activos refugio son un tipo de inversión de la que se espera que conserve o aumente su valor en tiempos de volatilidad del mercado. Dicho de otro modo, no están correlacionados o tienen una baja correlación con el mercado. Algo que ocurre, por ejemplo, con el inmobiliario: cuando la bolsa cae o las perspectivas económicas empeoran, activos como los inmuebles suelen quedar al margen.
Por todo ello los activos refugio son una estrategia para reducir el riesgo en tus inversiones. Se los considera seguros y confiables, y por lo mismo dan estabilidad y protección a los inversores en tiempos de crisis. Además del inmobiliario, son ejemplos comunes de activos refugio metales preciosos como el oro, los bonos del Gobierno, acciones de determinados sectores e incluso algunas divisas.
Ventajas de los activos refugio
Más en concreto, entre las razones por las que considerar invertir en activos refugio se encuentran estas:
- Estabilidad en tiempos de volatilidad: Los activos refugio son conocidos por su capacidad para mantener su valor incluso cuando otros mercados están experimentando turbulencias. Esto ofrece a los inversores una sensación de seguridad y protección frente a las fluctuaciones extremas.
- Diversificación de la cartera: Incluir activos refugio en una cartera de inversiones puede ayudar a diversificar el riesgo y mejorar la estabilidad general. Los movimientos opuestos a otros activos financieros pueden reducir la volatilidad global de la cartera.
- Preservación del capital: Los inversores a menudo recurren a activos refugio como una forma de preservar su capital en momentos de incertidumbre. Estos activos pueden actuar como un amortiguador contra la depreciación del valor de otros activos en tiempos difíciles.
- Potencial de crecimiento a largo plazo: Aunque los activos refugio son principalmente considerados como instrumentos de protección, algunos, como el sector inmobiliario, también ofrecen oportunidades de crecimiento a largo plazo. La demanda constante de viviendas y propiedades puede traducirse en apreciación del valor a lo largo del tiempo.
Tipos de activos refugio
Quizás te sorprenda saber que el dinero en efectivo se considera un activo refugio. Lo cierto es que el “dinero del colchón” siempre estará ahí, por más que se hunda la bolsa. Pero no es menos cierto que no ofrece ninguna rentabilidad ni ninguna protección frente a la inflación.
Las llamadas acciones defensivas se consideran un refugio por el sector económico que representan. La idea es que, por mal que vayan las cosas, la gente siempre va a demandar ciertos productos o servicios, como comida o productos sanitarios. Los títulos de las empresas de este sector se consideran, por ello, acciones no cíclicas ya que resisten mejor la incertidumbre.
El oro es otro de los refugios tradicionales. La razón principal es que suele ser una buena reserva de valor, protege bien contra la inflación y suele revalorizarse en épocas de crisis.
El sector inmobiliario como refugio
El sector inmobiliario ha sido históricamente considerado como un activo refugio debido a su estabilidad y capacidad para generar ingresos pasivos a través del alquiler. Las propiedades inmobiliarias tienden a mantener su valor y, en muchos casos, apreciarse con el tiempo, especialmente en ubicaciones estratégicas o de alta demanda. El crowdfunding inmobiliario, por ejemplo a través de Urbanitae, reúne las principales ventajas de la inversión inmobiliaria y multiplica la capacidad de diversificación, ya que solo se necesitan 500 euros para invertir en un proyecto. ¿Tú ya lo has probado?