España, destino preferente para el inversor institucional
Tras un año 2022 de récords, las cifras de 2023 representarán una moderación en la inversión inmobiliaria. Ahora bien, eso no significa un parón en la actividad. En particular, el pequeño inversor sigue mostrando un apetito creciente en el real estate. “En 2023 nuestro objetivo es doblar la inversión de 2022”, señala Sergio Arana. “Hemos empezado el año con buen pie. De los proyectos que nosotros financiamos, más del 60% corresponde a pequeños inversores“, explica el Real Estate Managing Director de Urbanitae.
De hecho, España parece particularmente bien situada en el plano internacional. A finales del año pasado, diversos medios, entre ellos el Financial Times, alertaron de una inminente crisis inmobiliaria global. La base de estos pronósticos era un informe de Oxford Economics que, en efecto, recogía datos alarmantes de un conjunto de 41 países. El aumento de los precios de la vivienda no suponía un problema grande con una financiación bancaria barata. Sin embargo, la crisis de Ucrania y el despegue de la inflación han complicado las cosas en una parte importante de Europa y en Estados Unidos. Por una parte, las hipotecas a tipo variable se están encareciendo rápidamente. Por otra, los posibles compradores de vivienda encuentran que los precios son muy altos, mientras que su salario no sigue el ritmo de la inflación.
En España, las lecciones aprendidas tras la crisis de 2008 dibujan un escenario muy distinto. El sistema bancario está saneado y los precios de la vivienda, que siguen subiendo, reflejan la escasez de oferta para la demanda existente. El inversor institucional lo sabe, y así se refleja en el apetito inversor que suscitan los proyectos en Urbanitae.
Sergio Arana ha participado en un debate en Radio Intereconomía sobre el estado del sector y la inversión inmobiliaria en España. A continuación puedes escuchar su intervención, junto a Borja Ortega (BNP Paribas Real Estate), Carolina Roca (Asprima), Carmen Panadero (WIRES) y Ana Elisa Rodríguez (Vía Ágora).