«El futuro del trabajo girará en torno al concepto de ‘ciudades de 15 minutos'»
Entrevistamos a Philippe Jimenez, country manager en España y vicepresidente de Ventas para el Sur de Europa y Brasil de IWG.
Los espacios de coworking dan libertad al usuario y le brindan espacios que promueven su creatividad y el networking en cualquier parte del mundo. Son un punto a favor de la nueva realidad laboral que la pandemia ha acelerado hacia una tendencia ya existente: la transición hacia un nuevo modelo de trabajo híbrido y flexible que contribuye a disminuir la huella de carbono, a rebajar costes y a mejorar la conciliación laboral y familiar. Una fórmula con la que todos ganan. Charlamos con Philippe Jimenez, country manager en España de IWG (International Workplace Group), la mayor red mundial de espacios de trabajo flexibles, con 3.500 centros presentes en 120 países y en 1.100 ciudades alrededor de todo el mundo.
IWG es una gran multinacional especializada en espacios flexibles y coworking. ¿Con cuántos centros cuentan en España y bajo qué marcas? ¿Dónde se ubican estos centros?
Actualmente IWG dispone de 55 centros en 16 ciudades españolas, entre ellas Alicante, Barcelona, Bilbao, Gijón, Madrid, Málaga, Marbella, Murcia, Palma de Mallorca, Valencia, Zaragoza, San Sebastián, Sevilla, Oviedo y Toledo, bajo sus marcas Spaces, Regus y HQ. A nivel global, nuestras soluciones de oficinas para el trabajo híbrido asisten a una base de clientes de millones de usuarios que disfrutan de las posibilidades de este formato.
¿Cómo es la situación de España respecto a otros países en lo que a espacios flexibles y de coworking se refiere?
En lo que va del año, el grupo ha abierto nuevos centros en Alicante, Madrid, Barcelona, Oviedo y Gijón, expandiendo las posibilidades de trabajo híbrido en distintas localidades. Si echamos la vista diez años atrás observamos que el coworking ha tenido un gran desarrollo en España, pese a las adversidades surgidas por la pandemia. Según un reciente estudio elaborado por TeamViewer, España es uno de los tres países de Europa con mayor apuesta por la digitalización de los trabajadores sin lugar fijo de trabajo, junto con Italia y Polonia, lo cual implica que los trabajadores dan gran importancia a la influencia de las tecnologías y las megatendencias digitales del futuro en su profesión. Para nosotros, la digitalización y flexibilidad es clave, al permitir que los trabajadores tengan la posibilidad de combinar su lugar de trabajo en centros de coworking, en casa y sedes corporativas.
Al igual que otros sectores de actividad IWG habrá tenido que adaptarse rápidamente a unas necesidades y a los cambios marcados por la crisis sanitaria de la covid-19. ¿Cómo ha sido esa adaptación y el impacto de la pandemia en la compañía? ¿Saldremos reforzados?
La pandemia tan solo ha acelerado una tendencia ya existente, la transición hacia un nuevo modelo de trabajo más flexible ha tenido un enorme impulso. El confinamiento durante los primeros meses, sumado a las restricciones de movimiento, ha desmontado la antigua idea de que para trabajar “hay que ir a la oficina”. Este mito ya estaba casi desmontado en otros países europeos. Sin embargo, en España estaba aún muy poco implantado. Con esto, la covid-19 ha demostrado que, con los avances en tecnología, de los que disponemos a día de hoy y que seguirán siendo cada vez más eficientes y sofisticados, no es necesario que toda la plantilla se encuentre presencialmente en el mismo edificio para que la actividad empresarial funcione. Estos meses ha quedado más que demostrado que los empleados son igual o más productivos, tanto desde un centro de trabajo flexible, como en sus propias casas o desde las oficinas centrales.
¿Qué niveles de demanda están teniendo los espacios de trabajo flexible?
La demanda de espacios de trabajo flexible ha ido en aumento en todas las regiones de España, no solo en las grandes capitales como Madrid o Barcelona. Los centros regionales de Asturias, País Vasco o Andalucía también han experimentado un repunte en sus tasas de ocupación. Un claro ejemplo es Sevilla, ciudad caracterizada por una fuerte capacidad de adaptación al escenario actual, que reúne entre sus calles uno de los hubs científicos más importantes de nuestro país y que, a su vez, está contemplando un auge en los espacios de coworking. Según el último informe realizado por IWG en el pasado mes de junio, el centro de Spaces Villasis, en la capital andaluza, fue la oficina de coworking de IWG más visitada de todo el país. Con esto se evidencia cómo los espacios de trabajo híbrido descentralizan la clásica creencia de que Madrid y Barcelona son las únicas ciudades con oportunidades de trabajo y expande la red para conectar a profesionales de distintos sectores y localidades.
¿Cuál es el perfil de usuarios de espacios de coworking? ¿Han surgido nuevos perfiles a raíz de la pandemia?
Los espacios de coworking han ido ganando popularidad en los últimos años, y con el boom del trabajo flexible, impulsado por la pandemia, hemos visto cómo los centros de coworking se han convertido en el aliado perfecto para trabajadores de todos los sectores, desde abogados, arquitectos, profesionales de la alimentación, y empresas de todos los tamaños, que han decidido confiar en este nuevo modelo de trabajo. En efecto, trabajar de forma híbrida contribuye a disminuir la huella de carbono, rebajar costes inmobiliarios y mejorar la conciliación entre la vida laboral y familiar.
La importancia de la ubicación en zonas prime era un aspecto fundamental a la hora de buscar un espacio de coworking. Ahora que se habla tanto de la implantación del modelo híbrido de oficinas, ¿la ubicación sigue siendo tan importante?
IWG suele ofrecer a sus clientes un abanico de ubicaciones estratégicas en cada ciudad para que puedan elegir entre edificios icónicos en zonas prime o distrito financiero, pero también en aeropuertos, cerca de las principales estaciones de trenes o en zonas residenciales. Además, estudios recientes de IWG apuntan que el futuro del trabajo girará en torno al concepto de ciudades de 15 minutos, en las que se pueda acceder a servicios fundamentales como la educación, el trabajo, la sanidad, el ocio, las tiendas y la alimentación en tan solo 15 minutos a pie de casa. Esto contempla un formato de trabajo híbrido en el que se combinen días de trabajo flexible, en centros de coworking, en casa, y jornadas en la oficina. El resultado trae consigo una reducción importante de emisiones de CO2 por la disminución de trayectos y un ahorro para las empresas y trabajadores.
«España es uno de los tres países de Europa con mayor apuesta por la digitalización de los trabajadores sin lugar fijo de trabajo»
Hablemos de la hoja de ruta y de expansión de IWG en España. ¿Cuáles son sus planes de crecimiento en España?
Nuestra apuesta por el mercado español lleva 30 años, enfocados en estar presentes en todas las capitales de provincia, así como en ciudades importantes de aquí a 2030, con una inversión directa y a través de franquicias. Queremos que los profesionales no se desplacen al trabajo, sino que el trabajo vaya a ellos. Al iniciar el 2021 nos propusimos el desarrollo y puesta en marcha de hasta 30.000 m2 de espacios de trabajo flexible en ciudades como Madrid, Barcelona, Alicante, Zaragoza, Oviedo y localidades de la periferia, y justo es eso lo que hemos estado haciendo. Hemos abierto este año 22.500m2 y hemos iniciado obras en otros 22.500m2. En Barcelona, por ejemplo, hemos abierto el Spaces Mas de Roda, en Madrid Spaces Campo de las Naciones, Spaces Recoletos, Spaces Azca y Regus Alicante, el primero de dicha ciudad.
Ya para terminar, ¿qué perspectivas de futuro tienen por delante el coworking y los espacios de trabajo flexibles?
Desde hace tiempo, en la mayoría de empresas y grandes corporaciones se calcula que cerca de un 50% del espacio no se llega a utilizar, incluso antes de la pandemia ya se hablaba de este fenómeno. Si pensamos en el futuro del coworking, con sus posibilidades versátiles de espacios flexibles, ofrece la mejor solución para rebajar costes sin perder calidad, y con el valor añadido que supone el acceso a la tecnología y la innovación más avanzadas. Los espacios de coworking suman de forma positiva a estas realidades laborales y al mañana, dando libertad al usuario y brindándole espacios que promuevan la creatividad y el networking en cualquier parte del mundo.
TribuApp
El coworking es una realidad en presente, pero con muchísimo futuro, las relaciones sociales nos dan la vida, la interacción con las personas, la socialización durante días intensos de trabajo… Se ha demostrado que se puede ser productivo en espacios de este tipo, fomentando todo tipo de ventajas y beneficios para uno mismo como es el networking por ejemplo…
¡Gracias por compartir, muy interesante!