Cuatro motivos por los que invertir en inmobiliario
La recuperación económica y la mejora de la capacidad de ahorro de las familias españolas han impulsado el apetito inversor en España, especialmente, en activos inmobiliarios. El volumen de inversión en este sector alcanzó los 9.200 millones de euros en 2017, un 9% más en relación al ejercicio anterior, según los datos de la consultora Savills Aguirre Newman. Unas cifras que ponen de relevancia el auge del ladrillo como una de las opciones más atractivas del mercado. Estos son algunos de los motivos por los que es muy recomendable invertir en bienes inmuebles frente a otro tipo de productos.
- Se trata de una inversión más segura
Decantarse por un activo inmobiliario es una de las opciones de inversión más estables. Frente al mercado de valores, que se caracteriza por precios que fluctúan y retornos inciertos, apostar por un inmueble representa una mayor garantía de ganancia, especialmente, en el caso del alquiler, que cuenta con una renta fija mensual. Asimismo, los precios de venta y alquiler de este tipo de activos suelen ser más constantes y predecibles que los de las commodities o el oro, que pueden sufrir posibles devaluaciones de moneda.
- Es un sector en crecimiento
El pasado año fue uno de los mejores para el sector inmobiliario y 2018 mantiene la senda alcista. En el segmento residencial, la compraventa de viviendas subió un 16,2% en febrero en relación al mismo mes de 2017, hasta sumar 41.480 operaciones, según el Instituto Nacional de Estadística (INE). De hecho, el plazo medio de venta de una vivienda cada vez es menor y ya se sitúa en 8,3 meses frente a los 8,6 meses del trimestre anterior, según datos de Tinsa IMIE Mercados Locales. Por su parte, el sector comercial, que cerró 2017 como uno de los ejercicios más exitosos de los últimos años, alcanzó los 910 millones de euros sólo en enero, lo que representa un 40% del volumen total obtenido en el primer trimestre del año pasado, según datos de Savills Aguirre Newman. Lo mismo ocurre con los locales industriales, donde el volumen de inversión se disparó un 85% el año pasado, hasta alcanzar los 1.500 millones de euros, su máximo histórico, según un estudio elaborado por la consultora Savills Aguirre Newman.
- Auge de los principales indicadores del mercado de la vivienda
El sector inmobiliario se encuentra en un imparable ascenso. En 2017, en España se produjeron 464.423 operaciones de compraventa de viviendas, un 14,6% más que el año anterior, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Una tendencia que, según el informe ‘Situación inmobiliaria en España 2018’, elaborado por BBVA Research, se mantendrá este 2018, cuando se espera que la venta de estos inmuebles aumente un 6%, lo que supondría cerca de casi 550.000 transacciones. Asimismo, la actividad constructora seguirá respondiendo a la positiva evolución de la demanda y se prevé que la firma de visados crezca alrededor del 16% este año, es decir, habrá unos 92.000 nuevos visados de vivienda de obra nueva. A esto también se une un incremento del precio de la vivienda, que se espera que muestre un avance del 4,9%, en promedio anual.
Ante estos datos, ¿estamos frente a una posible nueva burbuja inmobiliaria? La realidad es que no. El informe de Bankia Research, destaca que, aunque en abril de 2007, España alcanzó su máximo histórico de visados, con 885.181 documentos de obra nueva, en octubre de 2017 se firmaron apenas 75.146 visados, una cifra que ni siquiera llega a representar el 10% de la cota máxima alcanzada en nuestro país. Lo mismo ocurre con los certificados de obra: en agosto de 2008 fueron 656.733, mientras que en el mismo mes de 2017 la cifra se quedó en 49.410 certificados. Además, el sector de la construcción ha pasado de tener 2,65 millones de ocupados a los 1,14 millones de finales de 2017. Unos números que muestran que el sector inmobiliario en España aún está lejos de tocar techo.
- España es un país muy atractivo
España es una de las regiones con mayor afluencia de turismo de Europa debido, especialmente, a la buena climatología y la amplia oferta cultural y gastronómica. De hecho, Global Destination Cities Index (GDCI), el estudio anual de Mastercard, destaca Barcelona como la cuarta ciudad europea más visitada por los viajeros internacionales en 2017. Así, el atractivo turístico del país, unido a su conectividad global, sus múltiples posibilidades empresariales y sus sólidas infraestructuras posicionan a la Ciudad Condal y a la capital española como dos de las ciudades europeas más interesantes para invertir en el sector inmobiliario. En este sentido, el informe “Tendencias del Mercado Inmobiliario en Europa 2018”, elaborado por PwC y el Urban Land Institute, sitúa a Madrid en quinta posición entre las urbes europeas gracias a sus buenas expectativas económicas y el potencial de crecimiento de las rentas, y a la Ciudad Condal en la posición número once. Además, ambas metrópolis son dos de las preferidas por las marcas comerciales para expandirse ya que presentan el caldo de cultivo ideal para el desarrollo empresarial y un gran poder de atracción para posibles clientes, según el informe “World Cities: Mapping the Pathways to Success”.