Revicasa, la proptech que analiza el estado de una vivienda antes de comprarla
Conocer y detectar el estado real de un inmueble antes de tomar la decisión de adquirirlo es el principal objetivo de la proptech Revicasa. Apoyados por la tecnología más avanzada y de la mano de arquitectos colegiados con una amplia experiencia en proyectos de construcción y rehabilitación, Revicasa detecta las posibles deficiencias de materia de estructura, instalación eléctrica, fontanería, humedades y otros posibles desperfectos difíciles de apreciar a primera vista. Analizamos con Daniel Martín, Co-fundador de Revicasa, este nicho de mercado desconocido en España hasta el momento y todo lo que puede ofrecer a futuros compradores.
Os definís como expertos en inspección de viviendas. Para aquellos que estén pensando en comprar una vivienda de segunda mano, ¿cómo pueden solicitar una inspección con Revicasa?
Nuestro objetivo es ayudar a las personas que estén pensando en adquirir una vivienda a que lo hagan con la mayor tranquilidad, seguridad y confianza de que se encuentra en buen estado.
La solicitud de inspección con Revicasa se realiza a través de nuestra página web. El cliente solicita la revisión del inmueble que está interesado en adquirir, ya sea piso, bloque de viviendas o chalet. El día de la inspección nuestros técnicos revisan cada rincón de la casa con las herramientas tecnológicas más avanzadas, prueban todas las instalaciones y resuelven las dudas y preocupaciones que tenga el potencial comprador.
La inspección inmobiliaria es un sector emergente en España que brinda tranquilidad, seguridad y confianza a la hora de invertir en un inmueble. ¿Qué nivel de aceptación tiene este modelo en España y cuál es vuestro elemento diferenciador en comparación con otras empresas?
Somos una compañía de capital 100% español constituida a comienzos de 2023, con un modelo de negocio aún incipiente en España. En países como Estados Unidos este mercado anota cifras cercanas a los 4,5 billones de euros. En Europa, en países como Reino Unido y los países nórdicos, el modelo cuenta ya con gran aceptación. En España hemos introducido un servicio pionero que ayuda a comprar inmuebles con confianza.
En segunda mano, en una de cada cuatro viviendas detectamos algún problema grave que puede afectar a la estructura o a la habitabilidad
El servicio que ofrece Revicasa está teniendo bastante aceptación en España porque ofrece seguridad al comprador, además de ser un servicio novedoso. Nacimos en Madrid y la gran acogida que hemos tenido ha propiciado nuestra rápida expansión haciendo que estemos presentes en casi todas las comunidades autónomas de España como Andalucía, Cataluña, Galicia, Madrid, País Vasco y Comunidad Valenciana, entre otras.
Además, hemos desarrollado una aplicación propia con un componente de IA, que permite a nuestros arquitectos generar informes de inspección muy precisos, con fotos, estimaciones y comentarios específicos de alto valor.
En un plazo máximo de entrega es de 48h hábiles, nuestros arquitectos redactan un informe completo y con la mayor información posible.
¿Cómo se puede detectar el estado de una vivienda antes de su adquisición y qué es lo que se revisa en una inspección?
Todos nuestros técnicos son arquitectos o arquitectos técnicos colegiados con amplia experiencia en proyectos de construcción y rehabilitación. Además, cuentan con formación específica que realizamos en Revicasa y les proporcionamos la última tecnología disponible en el mercado para detección de vicios ocultos y comprobación del correcto estado de las instalaciones.
Durante una inspección de vivienda, nuestros técnicos revisan el exterior por si pudiera haber algún problema estructural, defecto constructivo y cumplimiento de normativa vigente del Código Técnico de Edificación. En cuanto a los interiores, se revisan con el máximo detalle y además se prueban todas las instalaciones, como la instalación eléctrica, fontanería o climatización. También se revisa el estado de los acabados y aislamientos en puertas y ventanas, el correcto aislamiento y detectamos cualquier posible vicio oculto por humedad o problemas constructivos o estructurales que se aprecian también en el interior.
¿Cuáles son los aspectos del estado real de un inmueble que detectáis de forma más habitual?
En segunda mano, en una de cada cuatro viviendas detectamos algún problema grave, que puede afectar a la estructura o pudiera ser peligrosa la habitabilidad. Principalmente encontramos instalaciones obsoletas, problemas de humedades y grietas estructurales. Además, detectamos que hay una estimación de costes en reparaciones muy alejada de la realidad por parte de los potenciales compradores y nuestro informe les permite analizar el coste real de inversión.
En obra nueva detectamos mucha incongruencia entre el proyecto y la ejecución final, como, por ejemplo, en suelo radiante que en plano aparece y en la realidad no está en todas las zonas donde debería, algo que podemos ver con nuestras cámaras térmicas.
La tecnología es clave Revicasa. ¿Qué tipo de innovaciones habéis implementado para llevar a cabo todo el proceso de inspección de una vivienda?
De cara a realizar un estudio detallado, los arquitectos colegiados que trabajan con Revicasa utilizan herramientas tecnológicas como cámaras térmicas, higrómetros, sonómetros o detectores de fugas de gas, entre otros. Por ejemplo, con las cámaras térmicas podemos comprobar si los sistemas de climatización funcionan correctamente cuando se trata de suelo radiante, aire acondicionado o radiadores.
No detectar un problema grave puede incurrir en un gasto adicional de entre un 5-20% del valor de adquisición
Por otro lado, hemos estado los últimos 6 meses desarrollando una app a medida con un componente IA propio, que está facilitando la cuantificación económica de las deficiencias que encuentran nuestros técnicos in situ. Asimismo, ofrece una valoración adicional sobre el origen y posibles soluciones a los problemas detectados.
El 82,1% de las viviendas de compraventa en España corresponden a inmuebles de segunda mano, según datos del INE. Sin embargo, muchas presentan problemas estructurales sin identificar que, a largo plazo, suponen un gasto extra para el comprador. ¿De qué porcentaje aproximado de gastos extra hablamos?
El no detectar un problema grave puede incurrir en un gasto adicional de entre un 5-20% del valor de adquisición. Dependerá de las dimensiones de la propiedad y del tipo de problema. En el caso de dificultades estructurales los gastos extra rondan entre 10.000 y 20.000 euros. Por ejemplo, si se tiene un problema de humedades, los costes suelen rondar entre los 3.000 y 15.000 euros, según el origen. Que la cifra aumente dependerá del problema en concreto.
Desde la experiencia de Revicasa, ¿qué valoración hacéis del estado de las viviendas de segunda mano en general? ¿Cuáles son los vicios ocultos más habituales en una vivienda de segunda mano?
Contamos con un parque inmobiliario muy anticuado y deteriorado en general. Los principales problemas ocultos de las viviendas son humedades, daños estructurales y problemas en instalaciones (electricidad, fontanería, sistemas de climatización…). Contrariedades que a simple vista no se pueden detectar, por lo que es necesario el empleo de ciertas herramientas para comprobar que el funcionamiento sea correcto.
Por otra parte, ¿qué es lo que busca fundamentalmente el comprador de vivienda de segunda mano?
Más allá de conocer las deficiencias de la propiedad, lo que más le importa al comprador es cuantificar el coste de las mismas. Los problemas encontrados y la estimación económica de subsanación que le demos al futuro comprador determinará si realmente merece la pena realizar esa inversión. Del mismo modo, le dará poder de negociación basado en nuestro informe, con lo que podría conseguir una reducción del precio final del inmueble.
En ese sentido, los compradores tienen justificada una rebaja en el precio si hay un problema oculto o deficiencias que a priori no detectaron y que posiblemente tampoco sabía la parte vendedora. Además, hemos comprobado que es más sencillo que los propietarios accedan a aceptar una oferta a la baja cuando el potencial comprador argumenta que existe una deficiencia que ha sido comprobada en la inspección.
Por otro lado, al comprador le ofrece la posibilidad de poder contar con la tranquilidad de que la inversión que va a realizar realmente se destina a un inmueble que merece el precio que va a pagar por él.
Operáis en plazas con un gran porcentaje de viviendas de segunda mano como Madrid, Cataluña, Valencia, Andalucía, País Vasco, Galicia y Extremadura. Con miras a futuro, ¿qué planes de expansión y crecimiento tenéis?
Nuestro objetivo es dar servicio en toda la Península Ibérica, Canarias y Baleares para finales de 2025. Antes de que acabe 2024 esperamos tener abierta otra delegación en la Comunidad Valenciana y el próximo año confiamos en triplicar la facturación.