Ventajas e inconvenientes de invertir en deuda pública

Invertir en deuda pública es una opción atractiva para quienes priman la seguridad. Investing in public debt is an attractive option for those who prioritize security. Investir dans la dette publique est une option attrayante pour ceux qui privilégient la sécurité. In öffentliche Schulden zu investieren ist eine attraktive Option für diejenigen, die Sicherheit priorisieren. Investire nel debito pubblico è un'opzione attraente per coloro che privilegiano la sicurezza. Investir em dívida pública é uma opção atraente para quem privilegia a segurança.

Ventajas e inconvenientes de invertir en deuda pública

Cuando lo que se busca es seguridad, invertir en deuda pública tiene pocos rivales. Su muy bajo riesgo –y una rentabilidad que, según el contexto, puede resultar atractiva– hacen de ella una opción de inversión muy popular. Sin embargo, como cualquier instrumento financiero, invertir en deuda pública tiene sus pros y sus contras. En este artículo exploramos las principales.

¿Qué es la deuda pública?

La deuda pública son valores de renta fija emitidos por el Estado, las comunidades autónomas u otros gobiernos locales y, en general, organismos públicos. En España, hay dos grandes clases. Por un lado, la deuda del Estado, que engloba las letras del Tesoro y los bonos y las obligaciones del Estado. Y, por otro, la deuda autonómica –que también es Estado– y la de otros organismos públicos.

En España, la subida de los tipos de interés ha espoleado el atractivo de la deuda pública, en particular de las letras del Tesoro. Estos títulos se caracterizan por su corto plazo –ahora, 3, 6, 9 y 12 meses– y por ser al descuento. Es decir, que su rentabilidad se deriva de la diferencia entre el precio de compra y el valor nominal en la fecha de amortización. La inversión mínima es de 1.000 euros, y hay que invertir siempre en múltiplos de esa cantidad. 

Los bonos y las obligaciones del Estado, por otra parte, son valores de renta fija a medio y largo plazo. En los bonos, el plazo de la amortización está entre 2 y 5 años; para las obligaciones, el mínimo está en 7 años. Estos activos sí pagan un interés periódico en forma de cupón. Lo normal es que el interés sea fijo y se abone cada año. De nuevo, el mínimo para invertir son 1.000 euros. 

La deuda autonómica y de organismos públicos puede ser a corto y largo plazo. Por lo demás, no difieren de manera sustancial de las letras del Tesoro y los bonos y obligaciones del Estado. 

El principal atractivo de la deuda pública es la seguridad. La desventaja más evidente es el reflejo de ese riesgo bajo: la baja rentabilidad. Ahora bien, en un entorno de tipos relativamente altos, la deuda pública es una alternativa interesante a otros productos conservadores, como los depósitos bancarios. 

Ventajas de invertir en deuda pública

Estas son algunas de las ventajas principales de invertir en deuda pública.

Seguridad y estabilidad

La deuda pública es emitida por el Estado, lo que la convierte en una de las formas más seguras de inversión. Los bonos del Estado, letras del Tesoro y obligaciones están respaldados por el Estado español, lo que minimiza el riesgo de impago. 

Aunque Grecia estuvo a punto de entrar en suspensión de pagos como consecuencia de la gran crisis de 2008, es muy raro que un Estado deje de atender el servicio de su deuda. De hecho, el país logró finalmente el respaldo de la Unión Europea, lo que impidió que incurriera en el impago de sus obligaciones. 

Rentabilidad fija

Invertir en deuda pública proporciona ingresos constantes y predecibles –eso que se busca cuando se quiere vivir de rentas–. Los intereses se pagan regularmente, lo que permite a los inversores planificar sus finanzas con mayor certeza.

Las últimas subastas de letras del Tesoro, celebradas los días 4 y 11 de junio, se cerró con un tipo de interés medio en el entorno del 3,4%. 

Diversificación de la cartera

La inclusión de deuda pública en una cartera de inversiones puede ayudar a diversificar y reducir el riesgo global. Esto es especialmente útil en momentos de volatilidad del mercado, ya que los bonos del Estado suelen ser menos volátiles que las acciones.

Acceso

La deuda pública está al alcance de cualquier tipo de inversor, desde pequeños ahorradores hasta grandes instituciones. En España, los inversores pueden adquirir estos instrumentos fácilmente a través de bancos y plataformas en línea.

Desventajas de invertir en deuda pública

Invertir en renta fija pública también tiene algunos inconvenientes que merece la pena considerar.

Baja rentabilidad

Una de las principales desventajas de la deuda pública es que suele ofrecer rendimientos más bajos en comparación con otros tipos de inversiones, como las acciones o los fondos de inversión. El mayor problema es que la rentabilidad que ofrecen no sea suficiente para compensar la inflación. Y la dificultad de aprovechar el potencial del interés compuesto

Riesgo de tipo de interés

Los precios de los bonos están inversamente relacionados con los tipos de interés. Si los tipos de interés suben, el valor de los bonos en el mercado secundario disminuirá, lo que puede ocasionar pérdidas si el inversor decide vender antes de su vencimiento.

Liquidez

Aunque la deuda pública es generalmente líquida, ciertos tipos de instrumentos, como las obligaciones a largo plazo, pueden no ser tan fáciles de vender rápidamente sin incurrir en pérdidas. Esto puede ser una desventaja para los inversores que necesitan acceso rápido a su dinero.

En conclusión, invertir en deuda pública puede ser una estrategia efectiva para aquellos que buscan seguridad y estabilidad en sus inversiones. Del mismo modo, para los que buscan diversificar su cartera y reducir el riesgo, la deuda pública puede ser una opción valiosa. No obstante, para maximizar los beneficios, es recomendable combinarla con otras clases de activos que puedan ofrecer mayores rendimientos y ayudar a mitigar los efectos de la inflación y los vaivenes del mercado. Por ejemplo, el sector inmobiliario

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