Retail y oficinas, a la cabeza del inmobiliario en 2022
Los buenos datos del desempeño del inmobiliario a lo largo de 2022 siguen aflorando meses después. Así se desliza del último informe MSCI Spain Annual Property Index 2022, que destaca a las oficinas como el segmento inmobiliario que más inversión ha registrado, un 40,9%. Le sigue el retail, con un 23,5% de la inversión. Por detrás quedan el industrial (18,2%), el residencial (11,9%) y los hoteles (3,7%). El informe se publica en más de 30 países y cuenta con información de más de 60.000 activos.
Las cifras positivas de inversión de las oficinas se alinean con lo que las grandes consultoras anticipaban para 2022. Una de ellas es Savills, que señalaba en su última edición de Impacts que el segmento de las oficinas no solo volvería a niveles precovid, sino que se convertirían en el activo más importante en términos de inversión. Según la consultora, las oficinas acumularon en España 2.560 millones de euros.
Situación similar viven en el mercado del retail, que a nivel de inversión parece ya haber dado la espalda al varapalo de la pandemia. Se ve, por ejemplo, en el segmento de los parques comerciales, cuyos datos de inversión y también de circulación ratifican la recuperación de 2022. Como revelaba también Savills, los parques comerciales, que se han convertido en una de las estrellas del mercado, captaron 311 millones de euros en 2022.
A pesar del contexto internacional y el económico heredado de la pandemia, el mercado inmobiliario no solo ha resistido, sino que ha crecido. Esa es una de las principales conclusiones del informe de MSCI, que señala que el inmobiliario español creció en el año 2022 un 33%. En efecto, nuestro país es uno de los pocos de Europa que ha tenido un crecimiento tan notable, solo superado por Bélgica. España es ya el cuarto mercado más activo en inversión inmobiliaria.
Calidad, ESG y flexibilidad, claves para el inmobiliario de 2023
Factores como los criterios ESG o la flexibilidad de usos serán determinantes para la evolución del inmobiliario a lo largo de estos años. De hecho, ya se han convertido en aspectos decisivos de cara a los inversores y su toma de decisiones. Así, objetivos como las cero emisiones durante la ejecución de los proyectos se están asentando como nueva realidad del inmobiliario. Esto se enmarca en una tendencia generalizada hacia la polarización, como asegura CBRE en su informe de perspectivas para 2023, por la que se están intensificando las diferencias entre los activos que han sabido seguir siendo atractivos para los inversores y los que no.
Así, en detrimento de los tradicionales, algunos segmentos alternativos, mejor adaptados a las nuevas exigencias del inmobiliario, podrían seguir creciendo este 2023, como los data centers, las residencias de estudiantes o el coliving. Si bien el primer semestre podría sufrir un ajuste de las inversiones de entre un 20 y un 30%, en la segunda mitad del año se recuperaría el ritmo de crecimiento.
En este contexto, el mercado de las oficinas puede verse sometido a un reajuste, con expectativas de contratación más bajas y una reducción de entre un 5 y un 10% respecto al año anterior. Por su parte, el retail, que se recuperó en 2022 en casi todos sus segmentos, podría seguir creciendo este año. Según CBRE, gracias a las ventas minoristas el comercial podría acabar el año encima de la media de la eurozona.